Ensenada, Baja California, México, 09 de septiembre de 2011. El Día Mundial de la Preservación de la Capa de Ozono se celebra el 16 de septiembre. ¿Cuándo inicia la atención mundial dirigida a una capa atmosférica que está a 30 kilómetros de altura? La historia es reciente. Inicia en 1970 cuando científicos expusieron que la capa de ozono de la atmósfera superior de la Tierra se estaba agotando, afectando la protección contra los rayos ultravioleta del Sol (UV-B).

En 1985, científicos británicos de la estación antártica Halley Bay confirman la existencia de un fenómeno atmosférico de características estacionales en la región polar conocido como el “agujero” de ozono. El fenómeno es el resultado aparente de la destrucción de la capa de moléculas de ozono en la atmósfera que protege a todos los organismos vivientes de la radiación ultravioleta. La exposición excesiva del ser humano a la radiación UV−B y la capacidad de ésta para disminuir las defensas inmunológicas, significan altas tasas de cáncer en la piel y enfermedades oculares.

La radiación UV−B afecta además la vida submarina, provocando daños hasta 20 metros de profundidad en aguas claras.

El bromuro de metilo también conocido como bromometano (CH3Br) se emplea como plaguicida para la fumigación de suelos agrícolas. Se trata de una de las sustancias más dañinas para la capa de ozono, junto con otras como las utilizadas en refrigerantes, aerosoles y extintores de incendios (CFC y HCFC). El Protocolo de Montreal es responsable de regular el consumo de las sustancias agotadoras de la capa de ozono. En 2005, México se comprometió a reducir 20 por ciento el consumo de esta sustancia, a partir de la línea base establecida (promedio del consumo entre los años 1995 y 1998). Asimismo, nuestro país tiene el compromiso de eliminar totalmente su consumo de mil 491 toneladas métricas de bromuro de metilo a partir del primero de enero de 2014. Esto significa que México dejará de importar definitivamente este contaminante a partir de esa fecha.

El Plan nacional de eliminación del consumo de bromuro de metilo en la fumigación de suelos y estructuras, es implementado por el gobierno de México a través de la Unidad de Protección a la Capa de Ozono (UPO), de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), en coordinación con la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (ONUDI). El objetivo del plan es eliminar el consumo de bromuro de metilo en México a través de prácticas alternativas con viabilidad técnica, económica, ambiental y social. Para cumplir con este objetivo, se proporciona asistencia técnica, capacitación y financiamiento a los usuarios de este fumigante que se comprometan a sustituirlo en forma definitiva. El fondo multilateral establecido en Viena para la implementación del Protocolo de Montreal, es el órgano encargado de brindar los fondos y el financiamiento para asistir a los países en vías de desarrollo a eliminar el uso de sustancias que agotan el ozono. El pasado 30 de agosto se llevó a cabo en el CICESE el Taller sobre alternativas al bromuro de metilo en el cultivo de flores, donde se presentaron resultados alentadores. Destacó el gremio agrícola productor de flores por eliminar casi en su totalidad el uso del bromuro de metilo en México. En 2005 consumían ocho por ciento del total nacional, y actualmente este porcentaje bajó a 1.5.

La Dra. Rufina Hernández, investigadora del Departamento de Microbiología y responsable del laboratorio de Fitopatología del CICESE, expuso que su investigación se centra en patógenos que atacan cultivos ornamentales en la región de Baja California. La Dra. Hernández parte de la premisa: si conoces a tú enemigo sabrás como atacarlo. Esto es, determinar qué le afecta al agricultor en su cultivo y así saber qué medida de control se debe implementar.

Para lograrlo, identifica y diagnostica los patógenos, es decir, los organismos que están produciendo la enfermedad. Luego trabaja en formas de control biológico, usando a su vez hongos que causan una enfermedad a los patógenos, degradando la pared celular del hongo nocivo. En términos científicos son conocidos como trichodermas, porque pertenecen al género Trichoderma spp. El control biológico es una medida amigable con el ambiente que no daña la capa de ozono y apoya a los agricultores en sus actividades.

La alianza entre el acuerdo internacional con la cascada de participantes ha sido particularmente exitosa y representa un logro que conjunta voluntad política, investigación, agricultores comprometidos y diversas instancias gubernamentales como la SEMARNAT y el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP). Sectores sociales que juntos amalgaman y concretan el objetivo común para nuestro país: 53 por ciento de eliminación de bromuro de metilo para finales de 2011.

Si todos los países cumplen con los objetivos propuestos dentro del Protocolo de Montreal, la capa de ozono podría recuperarse para el año 2050. Debido al alto grado de aceptación e implementación que se ha logrado hasta hoy, el Protocolo de Montreal es considerado un ejemplo excepcional de cooperación internacional.