11/2012 La ciencia de vinos y viñas

Ensenada, Baja California, México, 2 de marzo de 2012. Nuevas ideas encaminadas a mejorar la producción, el uso eficiente de recursos como el agua y la energía, la planeación del recurso vid haciéndolo sustentable, es decir presente por muchos años, las enfermedades de la planta, así como microrganismos aliados, entre otros, fueron los tópicos abordados durante el taller La Ciencia de Viñas y Vinos: Ejemplo de un enfoque colaborativo, sustentable e internacional que se realizó los días 1 y 2 de marzo en el Centro de Investigación Científica y de Educación Superior de Ensenada, B.C. (CICESE).

El taller se convirtió en un encuentro entre productores e investigadores de vid y vino, reunidos con la intención de desarrollar producción sustentable, amigable con el ambiente y con tecnología de uso eficiente de los recursos agua y energía. La industria vinícola repunta hoy día en México, se dijo, con un crecimiento del 15 por ciento anual en los últimos cinco años.

Industria unida al turismo, agroturismo y gastronomía, que gana adeptos productores y consumidores; los primeros en Baja California y los segundos principalmente en las grandes ciudades y centro del país.

Academia y empresa unidos

El Dr. Federico Graef Ziehl, director general del CICESE, calificó al taller como sui géneris, por tratarse de un evento donde confluyeron investigadores, estudiantes de posgrado, técnicos, productores de vid y vino; es decir, academia y empresa unidos para profundizar en el proceso de creación de los vinos y orientar la empresa hacia la sustentabilidad y rentabilidad. Encuentro que fortalece la integración de la triple hélice: academia, empresa y gobierno, es decir: la suma de esfuerzos.

Tres países una intención

Asistieron, por México, el CICESE; de Estados Unidos: San Diego State University (SDSU), y de Italia, la Fondazione Edmund Mach (FEM), con el apoyo del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT). Unieron saberes, fortalezas y propuestas para orientar buenas prácticas en el mundo vinícola.

El Ing. Jaime Palafox Granados, socio de la empresa vinícola Aldo César Palafox, quién además es parte del Sistema Producto Vid de Baja California, órgano donde están todos los productores para vino del estado. Este sistema ha trabajado estrechamente con investigadores del CICESE, con el objetivo de hacer investigación local que permita tener mayor rendimiento de sus plantas y hacer sustentable la industria vinícola en la región. En este sentido el Dr. Bruno Maiolini, presentó un trabajo comparando parcelas y su requerimiento de agua con respecto a la situación de las microcuencas de Trentino, zona vinícola italiana. Comentó que la problemática del agua es mundial, concluyó que es un problema medular de no fácil solución.

Producción vinícola en franco crecimiento

El Ing. Jaime Palafox comentó que el consumo per cápita de vino en México está en medio litro por habitante al año, por lo que las expectativas de crecimiento son buenas, aunado a un nuevo conocimiento de la industria vinícola regional en el país, que no era tan conocida hace una década.

En los últimos años han crecido los productores en Baja California en número y extensión, siendo 156 de uva y 72 vinícolas, lo que representa un esfuerzo conjunto importante para la zona y para México, como productor de vino de competencia internacional. La producción se ha vuelto más eficiente y por tanto más barata, los vinos mexicanos son competitivos en precio y calidad, pero enfrentan los impuestos especiales (IVA e IEPS) más altos del mundo. Los productores pagan 45 por ciento del costo de cada botella en impuestos. Lo que no se compara con otros productores como España, Argentina, Chile, Italia, Francia o USA, quienes pagan mucho menos. En el tema del agua, de gran relevancia para la producción agrícola de la vid, el Ing. Palafox comentó que la industria vinícola es la más eficiente de todo México, respecto al uso y consumo del vital líquido. Dio el ejemplo del agua requerida para una hectárea de uvas, que es una cuarta parte de lo que se requiere para una hectárea de alfalfa. En Baja California hay dos tipos de riego, por goteo o de temporal, siendo riegos muy eficientes. También están abiertos a encontrar nuevas alternativas que les propongan investigadores del CICESE e implementarlas. El Dr. Walter Oechel, de SDSU, propuso el re-uso como estrategia a largo plazo del agua.

Conclusiones del Taller

Las conclusiones se encaminaron a dar propuestas para crear una estrategia conjunta de trabajo e investigación con enfoque multidisciplinario e integral. Dentro del ciclo fenológico de la vid y producción vinícola, los productores se mostraron muy comprometidos y abiertos a permitir que los investigadores utilicen sus parcelas como sitios de investigación o laboratorios de campo. Sitios clave donde puedan probarse nuevas técnicas de producción, manejo orgánico de los cultivos, control de fauna nociva y manejo sustentable del riego y uso del agua y energía, entre otros. Se invitará próximamente a un taller similar binacional entre CICESE y SDSU. Y finalmente ambos actores, investigadores y productores, se comprometieron a abordar de forma integral la vitivinicultura del futuro, desde los enfoques social, educativo, cultural, científico, económico y político por una industria vinícola sustentable.