Ensenada, Baja California, México, 23 de junio de 2023. Con un recorrido sobre lo que han sido cinco décadas de geociencias en el CICESE, desde los primeros estudios geofísicos y sismológicos en esta región del país a la incorporación de grupos en geología y en geociencias ambientales; de cómo se pasó de temas locales a nacionales e internacionales; el nacimiento del posgrado en Ciencias de la Tierra y de las numerosas colaboraciones con empresas como CFE, Pemex y con instituciones académicas de varios países, hoy concluyó la Semana de Ciencias de la Tierra organizada en el marco del 50 aniversario del CICESE.
En parte académico, parte de remembranzas, pero también como un espacio de reflexión y análisis, este evento tuvo como objetivo enriquecer el conocimiento y llevar la información interdepartamental a todos quienes integran la División de Ciencias de la Tierra, según explicó su director, el Dr. Mario González Escobar.
En términos generales, la agenda de actividades para los cinco días se organizó en tres bloques académicos: geología, geofísica y sismología, uno por día; uno más para el posgrado y el último para pláticas enfocadas a cómo surgieron los grupos académicos, sus fundadores, evolución y remembranzas a casi 50 años de que se conformaron.
La apertura y bienvenida estuvo a cargo del director general del CICESE, Dr. David H. Covarrubias Rosales, quien destacó la trascendencia de las investigaciones que esta división ha desarrollado a lo largo de los años en los ámbitos regional, nacional e internacional.
Indicó que se han atendido los requerimientos de Baja California, por ejemplo, con la elaboración del Atlas de Riesgo de la entidad, pero lo mismo se está haciendo para la zona de La Paz, o con trabajos sobre sismicidad y vulcanología para el gobierno de Chiapas.
El lunes 19 de junio estuvo dedicado al Departamento de Geología, y se ofrecieron siete charlas y un curso sobre registro de pozos. La primera de estas charlas estuvo a cargo de Alejandro Hinojosa, quien definió su trabajo como de geología forense, pues utiliza las cicatrices que dejan en superficie los temblores y deslizamientos de laderas.
El primer caso de estudio en el que emplearon una técnica llamada topografía de alta resolución fue con el sismo El Mayor-Cucapah, ocurrido el 4 de abril de 2010 en el valle de Mexicali. Este movimiento de magnitud 7.2 tuvo una ruptura superficial de casi 120 km y un deslizamiento vertical y lateral del terreno de tres metros. En esa ocasión tuvo acceso a un registro con tecnología Lidar que realizó el INEGI antes del sismo en esa zona, y después, con recursos de la National Science Foundation, pudo hacer un vuelo ahí mismo y generar otro registro Lidar.
Aunque hubo diferencia en cuanto a la cantidad de puntos láser (la nube de puntos) por metro cuadrado entre ambos registros, pudo hacer la reconstrucción topográfica de alta resolución en la zona de ruptura y el consecuente mapa del campo de deslizamiento híbrido en 3D.
El segundo día, martes 27 de junio, fue dedicado al área de geofísica, y en él se abordaron temas diversos que fueron desde un panorama sobre las tendencias en exploración petrolera y geociencias, hasta la exploración de acuíferos con métodos electromagnéticos, pasando por descubrimientos de ciencia básica en los métodos geofísicos y las experiencias, desde la iniciativa privada, en la colocación de instrumentos para monitoreo durante la perforación de pozos.
En la jornada dedicada a sismología, Alejandro González y Carlos Reinoza compartieron experiencias de aplicar la tecnología GPS en la sismología a través de técnicas geodésicas; es decir, cómo, a qué velocidad y con qué aceleración se desplaza la península al ocurrir sismos.
A partir del sismo El Mayor-Cucapah, los investigadores del CICESE, en colaboración con instituciones de Estados Unidos, pudieron no solo conocer cómo fue el desplazamiento de la tierra, sino que lograron modelar qué ocurrió en el momento del sismo, qué fallas se activaron y hasta una nueva hipótesis sobre cómo actúa un sistema de fallas.
Ante la falta de datos sobre la sismicidad en la porción central de la península de Baja California, se realizaron mediciones geodésicas cerca del paralelo 28, en la costa del Pacífico, por Punta Eugenia, Bahía Tortugas y Clambay, y en el Golfo de California desde San Francisquito hasta el Arco, así como un perfil en el área de Bahía de los Ángeles.
En el día dedicado al posgrado, Joann M. Stock, profesora de Geología y Geofísica en el Laboratorio Sismológico del Instituto de Tecnología de California, y colaboradora en diversos estudios con personal del CICESE (Francisco Suárez, Arturo Martín Barajas, Margarita López), ofreció la charla “Género y diversidad: una perspectiva de 40 años de investigación científica”.
En su mensaje a estudiantes de ciencias de la Tierra, les recomendó hacer lo que les guste, seguir sus intereses, trabajar en diferentes temas y técnicas que les dé flexibilidad y opciones de colaboraciones. Tanto en la academia como en la industria, el papel de la mujer aún está subrepresentado. Hay mucho por hacer, agregó, y hay que redoblar esfuerzos. En el CICESE, por cada investigadora en funciones, tres hombres ocupan una plaza académica.