Ensenada, Baja California, a 13 de septiembre de 2024. Una amplia diversidad de aplicaciones de los conocimientos en microbiología, en los sectores de industria, academia y gobierno, fue expuesta por egresados y estudiantes durante el XVI Simposio Anual del Departamento de Microbiología del CICESE, celebrado el 12 y 13 de septiembre.
En esta edición, el programa del simposio estuvo enfocado a incentivar las interacciones entre egresados y los actuales estudiantes del posgrado en Ciencias de la Vida del CICESE, con orientación en microbiología.
Con la participación de aproximadamente 100 asistentes, el primer día de actividades del simposio inició con la conferencia magistral “Fábricas microbianas de nanovehículos para fines biomédicos”, a cargo de Rafael Vázquez Duhalt, investigador del Centro de Nanociencias y Nanotecnología (CNyN) de la UNAM, campus Ensenada.
“El futuro es hacer una medicina inteligente y tenemos las herramientas para eso”, afirmó el investigador, a manera de conclusión, tras exponer algunos de los proyectos en que está usando la nanotecnología para diseñar tratamientos contra el cáncer con nanopartículas que se dirigen específicamente a las células cancerígenas, reduciendo con ello los efectos adversos.
El programa continuó con una sesión a cargo de dos egresadas, Lluvia Vargas y Marisela Garduño, y un egresado, Eddy Sánchez, quienes presentaron avances de sus investigaciones desarrolladas desde instituciones académicas de Estados Unidos, Reino Unido y Canadá.
Posteriormente expusieron y participaron en un panel dos egresadas, Lucrecia Ramos y Jenny Meza, y dos egresados, Rodrigo Montana y Alejandro Plata, como parte de la sesión “Empresa y gobierno”, quienes trabajan en instituciones gubernamentales, en la industria y en un emprendimiento propio.
Los panelistas coincidieron en que el desempleo fue el escenario que enfrentaron tras egresar del posgrado, pero pudieron sortearlo gracias a que fueron flexibles con las oportunidades laborales que tuvieron y a las habilidades que desarrollaron durante la maestría.
Mertixell Riquelme Pérez, investigadora del CICESE y coordinadora del comité organizador del simposio, comentó que fue precisamente el propósito del panel exponer las dificultades que se encuentran al egresar del posgrado quienes se especializan en microbiología.
“Es una minoría la que continúa en la academia, las dificultades que estamos enfrentando de financiamiento, de plazas, hay una carencia de plazas a nivel nacional”, reconoció, por lo que al comité organizador le pareció pertinente mostrar la diversidad de áreas laborales a las que se pueden incorporar con las herramientas que les da el posgrado.
Mencionó que, con orientación en microbiología celular y molecular, del CICESE han egresado 77 estudiantes de maestría y 20 de doctorado, de un total de 282 de maestría y 60 de doctorado que han egresado del posgrado en Ciencias de la Vida.
Los egresados, detalló la investigadora, se encuentran en México, Canadá, Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Austria, Australia y Argentina.
Comunicación y docencia
En el panel de ponencias plenarias “Comunicación científica y docencia”, tres egresados del posgrado en Ciencias de la Vida del CICESE compartieron sus experiencias.
Leonora Martínez Núñez, ilustradora científica independiente, residente en Queensland, Australia, ilumina historias moleculares usando diversas herramientas digitales. El punto de la intersección entre ciencia y arte es la creatividad, y desde el 2020 ella ha optado por contribuir a comunicar avances científicos a través de la ilustración.
Interesado en el proceso de la vid al vino desde su época estudiantil, Luis Leobardo Pérez Mozqueda combina la investigación, la docencia y la vinculación desde el Centro de Estudios Vitivinícolas (Cevit) de Cetys Universidad, en Ensenada, aplicando desde la microbiología clásica hasta la metagenómica y consolidando el Grupo de Microbiología Enológica y Agrícola.
Por su parte, José Luis Duarte de Jesús ejecuta constantemente un viaje de ida y vuelta entre la investigación y la enseñanza, ya que en ambas encuentra una retroalimentación que ejerce desde su posición de profesor en el Instituto Tecnológico de Monterrey, campus Estado de México.
“No fue fácil conseguir trabajo, pero la maestría me dio las herramientas para enseñar y ahora me mantengo en constante actualización porque la investigación–enseñanza es una actividad cíclica”, compartió.
Posterior al panel, el primer día de actividades cerró con las presentaciones de los resúmenes de 10 estudiantes del posgrado, mientras que el segundo y último día de actividades estuvo dedicado a talleres de comunicación y liderazgo efectivos.