Ensenada, Baja California, México, 1 de agosto de 2017. Con la participación de 20 estudiantes mexicanos y cuatro de Colombia, comenzó la edición XIV de la Escuela de Verano en Óptica y Optoelectrónica (EVOO) del CICESE, la cual se ha convertido en la principal herramienta de promoción de su posgrado en Óptica.
La EVOO 2017 se lleva a cabo del 31 de julio al 11 de agosto, y según expresó su coordinadora, la Dra. Karina Garay Palmett, “la idea es comunicar el trabajo que se hace al interior del Departamento de Óptica del CICESE, en todas sus líneas de investigación. Está dirigido a estudiantes que se encuentran en la segunda mitad de la carrera, y los programas de los que vienen los aspirantes son relacionados con física, matemáticas, ingeniería, afines a la óptica”.
Durante la ceremonia de inauguración, el Dr. Eugenio Méndez Méndez, director de la División de Física Aplicada del CICESE, consideró que “el estudio de la luz misma y las oportunidades que esto nos ofrece para entender el mundo y desarrollar nuevas tecnologías, hace de la óptica un tema de investigación muy amplio, interesante y con muchísimos recovecos.
“Es por esta amplitud (…) que es muy difícil en la licenciatura dar una visión moderna de la óptica. Para agravar el asunto, no hay muchas universidades en México que tengan grupos de trabajo en óptica. En consecuencia la mayoría de los estudiantes de licenciatura tienen conocimientos muy básicos del tema y una concepción distorsionada sobre lo que hace un profesional en óptica.
“Además de las grandes aplicaciones que tiene esta disciplina, que permiten trabajar en una variedad de ambientes, la óptica es muy rica en temas de investigación y desarrollo. Una muestra de la importancia de la óptica en las sociedades modernas es que aproximadamente cada cinco o seis años se otorga un premio Nobel por contribuciones relacionadas a la óptica”.
Eugenio Méndez mencionó que los profesionales de la óptica pueden trabajar en ambientes industriales, artísticos o biomédicos, por mencionar algunos. “Con óptica se estudian temas que involucran escalas muy grandes, como en astronomía; también escalas microscópicas, como en biología, incluso en escalas nanométricas, como en la fotónica”.
Señaló que la óptica ha cambiado mucho en los últimos años, y “hoy en día es imposible hablar de la óptica sin involucrar cuestiones de química y de biología. Me parece que esta cuestión interdisciplinaria de la óptica pone al grupo de óptica del CICESE en una situación ventajosa con respecto a otros grupos del país. Además de los grupos de biólogos, meteorólogos, oceanólogos y físicos que trabajan en otros departamentos del CICESE, tenemos la fortuna de ser vecinos de los laboratorios de nanociencias de la UNAM y del campus Ensenada de la UABC. Existe además un posgrado conjunto en Nanociencias en donde participan químicos e investigadores en ciencia de materiales. Esto, como grupo, nos pone en una condición de privilegio”.
El director general del CICESE, Dr. Guido Marinone Moschetto, destacó que los 24 participantes de la EVOO podrán conocer a lo largo de las dos semanas que dura la escuela, el trabajo de los 21 investigadores que integran este departamento académico (de los cuales 28 por ciento figuran en el nivel 3 del Sistema Nacional de Investigadores -SNI-, el más alto que otorga este sistema). Además, en las tardes de la primera semana realizarán prácticas en los laboratorios especializados, mientras que durante la segunda semana participarán directamente en proyectos específicos bajo la coordinación de los investigadores responsables, técnicos y estudiantes de posgrado.
Por su parte, Karina Garay dijo que año con año se hace más difícil la selección de participantes. “Quisiéramos recibir a 40, por ejemplo, pero tampoco tenemos presupuesto para tanto. Las últimas cuatro escuelas hemos superado 120 aplicaciones. En esta fueron 117, para seleccionar sólo a 25”.
Dijo que uno de los seleccionados, colombiano, finalmente no pudo asistir por motivos personales, y destacó la presencia de alumnos provenientes de universidades mexicanas que nunca habían participado. Así, el grupo de becarios proviene de Coahuila, Chiapas, Hidalgo, Ciudad Guzmán (entre otras localidades), e instituciones como la UNAM, la BUAP y el ITESO. Es un grupo diverso y confió en que algunos de ellos vuelvan para incorporarse ya como estudiantes formales del posgrado.
El porcentaje de estudiantes que vuelven se ha mantenido alrededor del 10 por ciento, “pero creo que va a subir porque para este periodo de nuevas admisiones se presentaron varios estudiantes de las últimas escuelas de verano. Este año con el asunto de las becas es un poco más complicado y se volvió más estricta la selección, pero noté que (…) de los que van a entrar a la maestría creo que tres de los que ya están admitidos y se les puede otorgar beca, egresaron de las últimas dos escuelas”.
Consideró que la EVOO ha avanzado y se nota una evolución, además de que ha servido mucho la interacción con los muchachos que vienen de otros países. “El año pasado vino una chica de Argentina y también un chico chileno, y son personas que se mantienen en contacto; que están ahora mismo terminando sus estudios pero ellos mismos se encargan de promocionarnos. Por ejemplo, con la Universidad Nacional de Colombia, sede Medellín, ha sucedido que vino el primero hace dos años. Él se encargó de recomendar a sus compañeros y ya han invitado a investigadores de aquí para que vayan a Medellín (Pedro Negrete y Santiago Camacho)”.
Más que otros programas promocionales, esta escuela de verano es ahora mismo el principal atractor de estudiantes para el posgrado en Óptica del CICESE, un posgrado cuya maestría figura en el nivel de Competencia Internacional, el más alto del Programa Nacional de Posgrados de Calidad (PNPC) SEP-CONACYT.