Ensenada, Baja California, México, 24 de noviembre de 2017. Con un total de 167 egresados, 129 de sus programas de maestría en ciencias y 38 de doctorado, el CICESE llevó a cabo hoy su ceremonia de graduación en la que destacó la confianza que tiene su personal académico en “haber formado estudiantes críticos, con conciencia social y que ayuden a generar ese efecto transformador que necesita nuestro país”.

El director general de este centro de investigación, Dr. Guido Marinone Moschetto, informó que con esta cifra, que abarca el periodo del 25 de noviembre de 2016 al día de hoy, el CICESE ha egresado un total histórico de 2 mil 770 estudiantes, de los cuales 2 mil 249 corresponden a egresados de los programas de maestría y 521 de doctorado.

¿Y qué están haciendo nuestros egresados? De acuerdo al Programa de Seguimiento de Egresados del CICESE (que compila información de 1,740 exalumnos) hay 1,299 que trabajan en el sector público, 422 en el privado y 19 en el social, por lo que perspectiva laboral es buena en términos generales.

Además, del total, hay 526 que figuran en el Sistema Nacional de Investigadores (SNI), la métrica académica quizá más importante de México.

Reconoció, al igual que hiciera la directora de Estudios de Posgrado de este centro, la Dra. Rufina Hernández Martínez, que no es fácil para la mayoría de los habitantes acceder a un posgrado, por lo que los conminó a asumir con responsabilidad lo que esto conlleva.

La ceremonia fue solemne y se llevó a cabo en el auditorio institucional. Vestidos con toga y birrete, estuvieron presentes los directores de las áreas académicas, los coordinadores de los 18 programas de posgrado con que cuenta la institución y más de 90 egresados, la cual es una excelente cifra pues muchos de ellos cambian de ciudad en cuanto obtienen su grado, ya sea porque continúan sus estudios en México o el extranjero, o porque obtienen empleo fuera de esta ciudad.

A nombre de los egresados de doctorado hizo uso de la palabra Shery Umanzor Rodríguez, de nacionalidad costarricense, quien señaló: “México es especial porque borra fronteras como ningún otro país. Al llegar a México sólo quería tener mi grado e irme; ahora no. Aquí entendí las grandes similitudes que tenemos como países, y que muchos de nuestros problemas son por fuerzas externas.

“Cuando firmamos la aceptación de beca también firmamos un contrato social, porque quienes hemos tenido oportunidad de estudiar hasta alcanzar este grado somos privilegiados y debemos luchar por lograr un cambio.

“Paulo Freire decía que la educación no cambia el mundo, pero sí cambia a las personas que pueden cambiar al mundo. Nosotros debemos luchar en este mundo contra la desigualdad, la injusticia y sobre todo contra el conformismo. Nosotros debemos ser agentes de cambio; juntos podemos contribuir a lograr un cambio.

“Estoy muy agradecida con el CICESE, con el CONACYT y con México, este gran país que me enseñó a ser más humilde y agradecida”.

Por su parte, Heberto Molina Villamil, a nombre de los egresados de maestría, abordó la disminución del presupuesto destinado a la ciencia y tecnología en nuestro país y enfatizó que si bien en algunas ocasiones los temas de tesis no ayudan a resolver una necesidad específica, se debe seguir luchando para demostrar que la ciencia es una herramienta que puede llevar bienestar a las personas.

El Dr. Eugenio Méndez Méndez, director de la División de Física Aplicada también dirigió un mensaje donde destacó el salto cualitativo que se puede apreciar en todos los graduados; de cómo llegaron y en dónde están ahora.

Dijo que uno de los aspectos más satisfactorios, como académicos, es la interacción que tienen con los jóvenes estudiantes y ver cómo evolucionan. “Es algo que nos enorgullece y nos muestra que algo de lo que hacemos vale la pena.

“En una sociedad todos jugamos un papel, y hay muchos papeles qué jugar. Cuentan que en una visita que hizo el presidente Kennedy a la NASA, vio a una persona que sostenía una escoba, y le preguntó sobre lo que estaba haciendo. Y esta persona le contestó: ‘estoy ayudando a poner a un hombre en la Luna’. Por ello, hagan lo que hagan traten de hacerlo bien, y den lo mejor de sí mismos. Tengan la valentía de seguir sus instintos y sus convicciones.

“A nombre de sus maestros les deseo lo mejor en su vida profesional. Esperamos haber formado estudiantes críticos, con conciencia social y que ayuden a generar ese efecto transformador que necesita nuestro país. Recuerden siempre que ustedes son nuestros mejores embajadores, y que esta es su casa”, terminó diciendo.