Ensenada, Baja California, México, 22 de marzo de 2019. Un estudio sobre tiburones martillo en el que participaron especialistas de siete países, entre ellos una egresada del CICESE, demostró la importancia de las áreas marinas protegidas y la necesidad de extenderlas hasta sus rutas migratorias para garantizar la protección de esta especie en peligro de extinción.
El estudio “Movimientos de tiburones martillo (Sphyrna lewini) en la Isla del Coco, Costa Rica y entre islas oceánicas en el Pacífico Oriental Tropical”, se publicó en PLOS One, una revista científica de contenido abierto.
Elena Nalesso, quién obtuvo su maestría en el Centro de Investigación Científica y Educación Superior de Ensenada (CICESE) bajo la dirección del doctor Oscar Sosa Nischisaki, es la principal autora del artículo.
Esta investigación se llevó a cabo de la mano de un grupo de científicos con base en el Pacífico Tropical Oriental, quienes han marcado tiburones martillo con transmisores acústicos en los puntos críticos de las islas oceánicas de la región para estudiar sus movimientos dentro del área protegida marina del Parque Nacional de Isla del Coco en Costa Rica, Parque Nacional Galápagos, Ecuador y el Parque Natural de Malpelo en Colombia.
Todos forman parte parte de la iniciativa regional MigraMar, que se integró para comprender los movimientos de las especies en peligro de extinción con respecto a las reservas marinas.
“Aunque algunos tiburones mostraron un alto nivel de residencia en Isla del Coco, nuestra investigación indicó que los pertenecientes a otras islas se mueven constantemente entre estas por zonas en donde hay poca o ninguna protección y en donde se ven constantemente amenazados por las operaciones de la pesca comercial”, dijo Nalesso.
Esta investigación sugiere que las poblaciones de Galápagos y Malpelo pueden usar Coco como un punto de referencia o parada de navegación durante las migraciones estacionales a la costa de América Central y Sudamérica. Con esto no solo se demuestra la relación de las islas oceánicas y la importancia de éstas para la conservación de la fauna marina, sino que expone la posibilidad de crear una red para vincular las zonas de habitat crítico para salvaguardar la migración de esta especie en peligro de extinción en el Pacífico Tropical Oriental.
“Los nuevos investigadores de ecología marina enfrentan grandes desafíos al desarrollar el conocimiento para la conservación de la fauna marina y su uso sostenible, bajo la presión del rápido crecimiento de la población mundial y su demanda de alimentos”, comentó el Dr. Oscar Sosa-Nishizaki, supervisor de Nalesso durante su posgrado en Ecología Marina en el CICESE.
El Dr. Alex Hearn, profesor e investigador en el Galápagos Science Center en la Universidad San Francisco de Quito (Ecuador), y uno de los supervisores de tesis de Elena Nalesso, dijo que “las implicaciones para el manejo y la conservación de esta investigación indican que la protección de los hotspots oceánicos es esencial pero insuficiente para la protección de los tiburones martillo. Si queremos recuperar estas especies en peligro de extinción, los esfuerzos de conservación también deben incluir la protección de sus rutas migratorias”.
Todd Steiner, director ejecutivo de Turtle Island Restoration Network dijo que “para garantizar la protección de las especies altamente migratorias, necesitamos nuevas herramientas de conservación, como las propuestas en la ‘MigraVía Coco - Galápagos’ la cual sugiere la creación de ‘autopistas’ protegidas que unan los puntos de las áreas marinas en conservación con sus accesos oceánicos”.
Randall Arauz, actualmente Asesor de Políticas de Conservación Marina de Fins Attached Marine Research and Conservation dijo: “Estamos comprometidos a continuar este proyecto de investigación de 14 años y proporcionar a las autoridades costarricenses la mejor información posible para ampliar la protección alrededor de la Isla del Coco”.
Los coautores del artículo son Elena Nalesso, Alex Hearn, Oscar Sosa Nishizaki, Todd Steiner, Alex Antoniou, Andrew Reid, Sandra Bessudo, German Soler, A. Peter Klimley, Frida Lara, James T. Ketchum y Randall Arauz.
Las instituciones que participaron son: El CICESE; el Programa Restauración de Tortugas Marinas, San Jose, Costa Rica; el Colegio de Ciencias Biológicas y Ambientales, del Galapagos Science Center de la Universidad San Francisco de Quito, Ecuador; la Turtle Island Restoration Network, de California, Estados Unidos; MigraMar, con sede en California; el Fins Attached Marine Research and Conservation, de Colorado; Jurassic Shark Expeditions, de Reino Unido; la Fundación Malpelo y Otros Ecosistemas Marinos, Bogotá, Colombia; el Institute of Marine and Antarctic Studies, de la Universidad de Tasmania, Australia; el Department of Wildlife, Fish & Conservation Biology, de la Universidad de California, Davis, y la asociacion Pelagios Kakunjá A.C., La Paz, Baja California Sur.
El articulo en PLOS One, una revista científica creada por Public Library of Science (PLOS) en 2006, puede ser consultada en la siguiente liga:
https://doi.org/10.1371/journal.pone.0213741