Ensenada, Baja California, México, 28 de abril de 2020. El florecimiento algal (marea roja) que se observa actualmente en la Bahía de Todos Santos se considera como uno de los más intensos desde 2005; es provocado por un dinoflagelado llamado Lingulodinium polyhedra, y hasta el momento no se ha detectado que sea tóxico.
A pesar de su intensidad, se encuentra dentro de la normalidad de los últimos años, considerando que “…en 2005 se registró un florecimiento de Lingulodinium polyhedra que abarcó desde Eréndira hasta el norte de San Diego. Desde entonces no se había presentado otro con la misma intensidad, hasta ahora. El florecimiento que vemos actualmente cubre toda la bahía y la zona costera hacia el norte; abarca unos 20 kilómetros desde la línea de costa hacia mar adentro, en una franja que llega hasta el norte de San Diego, California”.
Lo anterior lo comentó el Dr. Ernesto García Mendoza, investigador del Departamento de Oceanografía Biológica del CICESE y responsable del Laboratorio de Ficotoxinas (FICOTOX).
Un florecimiento algal, conocido comúnmente como marea roja, es la acumulación excesiva de microalgas que forman parte del fitoplancton marino. La abundancia de estos organismos es tal que crea un efecto en la coloración del agua, llegando a teñirse de un color rojizo.
Dependiendo del organismo que esté presente (de la especie de microalga) se puede determinar la toxicidad del florecimiento algal y definir si es nocivo o no para el medio ambiente o la salud pública.
“A la fecha no se han registrado efectos nocivos de este dinoflagelado durante los florecimientos recurrentes en esta bahía. Se ha reportado que esta misma especie (Lingulodinium polyhedra) en otros lugares produce una toxina. Nosotros hemos monitoreado moluscos bivalvos (ostiones, mejillones, almejas) cuando se han presentado estos florecimientos, y no hemos detectado la presencia o la acumulación de esa toxina”, compartió.
Dijo también que a este florecimiento se le puede considerar monoespecífico, es decir, que de la comunidad fitoplanctónica presente, de 95 a 98% está dominada por Lingulodinium polyhedra.
Esto trae como consecuencia una característica particular llamada bioluminiscencia. Durante el día podemos ver el mar con una coloración roja, y durante la noche pareciera que brillan las crestas de las olas al romper.
Agregó que la bioluminiscencia es un fenómeno común en el mar. “Es una reacción química que ocurre cuando un organismo, en este caso Lingulodinium polyhedra, está excitado o estresado. Es efecto de las concentraciones tan altas en que se presenta. Es un fenómeno natural y no produce ningún daño”.
Los factores que determinan la presencia de este tipo florecimientos, mar rojo por el día y brillante por la noche, son multiespecíficos. No se ha relacionado con la ausencia de turismo en las playas. En algunos trabajos se ha reportado que se asocia a las lluvias intensas durante el invierno.
En el Laboratorio Ficotox del CICESE, coordinado por el Dr. García Mendoza, se realiza monitoreo e investigación sobre la fisiología y toxicidad de los organismos que producen florecimientos algales nocivos en esta región del país. Las microalgas se aíslan y se mantienen en cultivos para ver qué condiciones son las que favorecen su crecimiento y la producción de toxinas.
“En Ficotox realizamos un monitoreo regular mensual, vamos a tomar muestras a diferentes estaciones, aproximadamente 18, dentro de la Bahía de Todos Santos y hacía el norte, hasta la bahía de Salsipuedes. Tomamos el agua con una botella especial, la llevamos al laboratorio y la filtramos para cuantificar la materia orgánica presente. Se fijan muestras para verlas en el microscopio y se miden toxinas en el material que se colecta. Bueno, eso es lo que hacíamos; ahora con la contingencia paramos este procedimiento. Sin embargo, las compañías productoras de maricultura nos han proporcionado muestras de sus monitores, por lo que seguimos evaluando; no hemos dejado de recibir muestras”, finalizó.