Ensenada, Baja California, México, 20 de noviembre de 2020. A 10 años de su formación, y por su éxito en captación de alumnos, crecimiento académico y de infraestructura, distinciones, indicadores de eficiencia terminal y tasa de graduación, desempeño de los egresados, así como su capacidad de adaptación y pertinencia, el posgrado en Ciencias de la Vida del CICESE tiene la oportunidad de convertirse en un referente para los programas de ciencias biológicas en el noroeste de México, según trascendió en el simposio “Posgrado en Ciencias de la Vida, diez años de egresados al servicio de la ciencia y la sociedad”.
Organizado el 18 y 19 de noviembre en modalidad virtual, este simposio contó con una asistencia record de 483 personas en sus cuatro sesiones académicas y tres mesas de discusión; éstas fueron conducidas por 12 moderadores y se presentaron 38 ponentes. Además, en los dos días estuvieron accesibles 50 carteles virtuales (ePosters) de los estudiantes de maestría y doctorado, con sus proyectos de tesis.
Durante la apertura del simposio, la directora de Estudios de Posgrado del CICESE, Dra. Rufina Hernández Martínez, dijo que en parte la consolidación de este programa se debe a su buena captación de estudiantes, en un principio de egresados de la carrera de biología y afines de la UABC, y hoy en día de los estados de Sonora y Sinaloa, principalmente. Este aumento de popularidad permitió incrementar la matrícula hasta los 32 alumnos que hoy se tienen en promedio por generación, el más alto en los últimos años de los 18 posgrados que integran la oferta educativa del CICESE.
¿Y por qué se logró esto? “Porque somos buenos organizando eventos, como este simposio y congresos nacionales e internacionales. Esto, a su vez, ha permitido que nuestros estudiantes y sus asesores obtengan distinciones, premios y el reconocimiento internacional de nuestro posgrado. También hemos crecido bastante en estos años académicamente, con la contratación de nuevos investigadores, la creación del Departamento de Innovación Biomédica y la incorporación de cátedras CONACYT que han venido a inyectar sangre nueva a la División de Biología Experimental y Aplicada”.
Destacó como principal logro de la maestría su excelente eficiencia terminal (el tiempo que tardan en obtener el grado respecto a lo programado) y tasa de graduación (número de graduados respecto a ingresos), arriba de 90 por ciento en promedio, y explicó que tener una matrícula constante y en aumento les permite graduar estudiantes en tiempo y en forma. En doctorado esto no es así; los indicadores son más bajos y erráticos, por lo que el principal reto es mejorarlos.
Dijo que en estos 10 años han graduado 205 estudiantes del programa de maestría en ciencias y 43 de doctorado. La mayoría están trabajando en México, pero hay graduados desarrollando su carrera en Estados Unidos y Canadá. También algunos graduados ya forman parte del Sistema Nacional de Investigadores (11 como Candidatos a Investigador y 4 en el nivel 1), “lo que habla de la pertinencia del posgrado y de nuestros logros”.
En la ceremonia de apertura del simposio el director del CICESE, Dr. Guido Marinone Moschetto, reconoció el esfuerzo de quienes iniciaron este posgrado, un esfuerzo que se remonta a bastantes años más de los 10 que se festejan oficialmente, y que ha resultado muy fructífero. Una medida de este éxito, dijo, es que de todos los posgrados del CICESE este es el que tiene mayor matrícula, y cuyos estudiantes y asesores son distinguidos internamente, cada año, por producir el mayor número de publicaciones y por alcanzar el mayor número de citas, y por tener varios reconocimientos internacionales. “Esto habla de la calidad con la que se está desenvolviendo”.
Uno de estos impulsores es el doctor Salomón Bartnicki, el primero y único Investigador Emérito que tiene el CICESE, quien hizo una cronología para explicar la historia del posgrado, una historia exitosa que ha dependido de las acciones que se tomaron en su momento.
Con este contexto histórico, la doctora Rufina Hernández situó el arranque del posgrado en Ciencias de la Vida en 2010, cuando fue aceptado en el Programa Nacional de Posgrados de Calidad (PNPC) como de reciente creación. Reconoció el trabajo de los doctores Meritxell Riquelme y David Covarrubias, quienes se desempeñaban en ese momento como la primera coordinadora del posgrado y como director de Estudios de Posgrado, respectivamente. También destacó que hayan sido únicamente mujeres quienes han coordinado este programa, pues después de Meritxell Riquelme le siguieron ella misma, Clara Galindo y ahora Patricia Juárez.
Y fue Patricia Juárez, la actual coordinadora y principal organizadora del simposio, quien sintetizó cómo ha evolucionado el posgrado hasta hoy: “puedo decir que en solo diez años el posgrado en Ciencias de la Vida se ha convertido es uno de los más importantes y consolidados de CICESE, como lo muestran el número de estudiantes egresados, la gran demanda de aspirantes que tiene en cada convocatoria, y la alta eficiencia terminal de graduación. Nuestro posgrado es referencia a nivel regional y en el noroeste de México, ya que al ser parte de un centro CONACYT de alto nivel como es el CICESE, los estudiantes lo ubican como un posgrado de alta calidad”.
En los dos días que duró el simposio se organizaron cuatro sesiones académicas dedicadas a Microbiología Celular y Molecular, a Biotecnología Marina, Biomedicina y Bionanotecnología, y Biología de la Conservación. Además, se organizaron tres mesas redondas de discusión en donde participan exalumnos e investigadores, todo en modalidad virtual.